Post | Mudando la piel



Si hay animales que necesitan mudar la piel para crecer, acorde con su nuevo tamaño y edad, las personas necesitamos introducir cambios o, simplemente, toparnos con situaciones que nos obliguen a cambiar de rumbo. Y oye, hay veces que sin saberlo te hacen un gran favor.

Los finales nos hacen reaccionar y nos ponen en situación para afrontar lo que venga. Sólo está permitido mirar atrás para coger impulso y avanzar. No puedes perder el tiempo en pensar "qué hubiera pasado si", "qué hubieras dicho si"... Son meras conjeturas. No te enroques con pensamientos que ya nunca serán realidad.

En mi caso dejé de ser yo. No había interés, tampoco ilusión. Solo una mezcla de apatía y desgana que, sumado a mi estado de salud, provocaron que mi yo de entonces se apagara.

No sabía con certeza lo que exactamente quería. Pero tenía tan claro lo que NO.
Ni sombras ni ausencias.
Ni silencios ni vacíos.
Ni sorpresas por no tener suficiente información.
Ni falta de respuestas por no haber hecho la pregunta exacta. Esa precisa, incisiva o que suena impertinente ante terceros.

A lo largo de esta historia conocí personas, me crucé con gente. Y escuchas, observas,  aprendes. Unas se quedan y creces con ellas.
Otras se diluyen y hoy ni las recuerdas.

Soy la primera que cambia, renuncia y no comprende. Porque lo que antes era, ahora es diferente. Incluso lo que hace años fui, hoy continúa. ¿Es ilógico? o no, pero es parte de este proceso de cambio de piel.

Asumo la libertad para decidir, aunque me equivoque o dude. Dudar es bueno, te hace reflexionar, buscar otras opciones, analizar, sintetizar, comparar... O dicho de otro modo, te hace reaccionar, ser coherente y consecuente.

Seguiré siendo quien establezca el ritmo a mis tiempos, según la necesidad. Ser inmune a los daños derivados de una realidad impuesta, tóxica y sin sentido aparente, al menos para mí.

Y cuando me sienta segura de lo que soy y lo que deseo, poder alzar la voz y decir que sí, que fui. Y hoy sólo soy lo que siempre he querido ser.

Imagen: pixabay

Entradas populares de este blog

Amiga ansiedad

Compás de rutina

Halo de miedo